Cuando todo lo demás falla, intenta reformular la forma en que ves tus objetivos para detener tu hábito de postergación. Todos hemos estado allí: sabes que debería estar trabajando en un proyecto, pero parece imposible evitar las distracciones. Lo siguiente que sabes es que has perdido la mayor parte de la tarde, sin embargo, existen hábitos simples que puedes formar y te ayudarán a tomar ventaja sobre la demora. Aquí te dejo 7 formas de aprovechar tus emociones para vencer el retraso en tus actividades: ATA LA TAREA A UN OBJETIVO MÁS GRANDE POR EL QUE SEA APASIONADO. Somos más rápidos para trabajar en un proyecto cuando tenemos una carga emocional positiva en torno al resultado. Aunque no podemos ver cómo completar el informe tendrá un beneficio inmediato para nosotros, pensar en lo maravilloso que se sentirá obtener esa promoción que anhelamos nos ayudará a motivarnos si vemos que hacer un gran trabajo en el informe es un paso adelante. COMIENZA CON LA PARTE MÁS FÁCIL PRIMERO. El paso más difícil para completar una tarea es comenzar. A menudo, pensamos en algo que tenemos que hacer en términos de secuencias lineales, principio, medio y final. Sin embargo, en muchos casos podemos comenzar en cualquier lugar y trabajar hasta el final. Comenzar en la parte más fácil requiere menos resistencia emocional, y una vez que comenzamos, tendemos a ponernos en marcha, lo que nos da el impulso para seguir adelante. SECCIONA EN PEQUEÑOS FRAGMENTOS. La tarea parecerá menos desalentadora si nos decimos a nosotros mismos que solo pasaremos cinco minutos trabajando en ella. Al igual que comenzar con la parte más fácil primero, descubrimos que una vez que estamos en el trabajo real, nos resulta más fácil continuar concentrándonos que volver a hacerlo más tarde. Nos encontraremos trabajando más allá del tiempo comprometido que nos dijimos. GESTIONA TUS DISTRACCIONES ANTES DE COMENZAR. Si luchas con la impulsividad, las posibilidades de distraerse se reducirán enormemente si piensa en lo que puedes desviarte de tu trabajo antes de comenzar. Esto le permite desconectar y controlar todo y a todos los que podrían interrumpir su enfoque y desanimarlo. AUTO CONCIENCIA DE LOS ENTORNOS EN QUE TRABAJAS MEJOR. Un espacio no sirve para todos cuando se trata del mejor entorno para ti. Me di cuenta de esto cuando en la universidad, nos aconsejaron que para estudiar efectivamente uno necesitaba un lugar tranquilo sin molestias. Para mí, un ambiente tranquilo me llevó a soñar despierto y desconectarme. Tener un área con muchos otros estudiantes alrededor realmente estimuló mi capacidad de concentración. Si no sabes cuál es tu mejor entorno, practica en otros diferentes hasta que encuentre el que más te estimule. DATE UNA RECOMPENSA A LO LARGO DEL CAMINO. Antes de comenzar a eliminar algo de tu lista de tareas pendientes que llevará mucho tiempo y esfuerzo, prepárate con un sistema de recompensas en el camino. Piensa en lo delicioso que sabrá ese cremoso café con leche doble moca antes de trabajar una o dos horas en su proyecto. Después de que hayas hecho tu trabajo, saborea la recompensa y recuerda lo bien y satisfactoria que se sintió la próxima vez que tengas que hacer un trabajo que emocionalmente preferirías evitar. Haz que la recompensa sea algo que normalmente no te darías o haz algo por ti mismo para sentirte especial. TRABAJAR PARA SUPERAR EL PERFECCIONISMO. Tener la necesidad de ser perfecto puede ser un obstáculo importante para comenzar cualquier proyecto. Winston Churchill lo resumió bien: “La perfección (ismo) es el enemigo del progreso. Cuando decidimos que queremos probar algo nuevo, la oportunidad y el miedo al fracaso y al rechazo vienen de golpe ”. El miedo a cometer errores nos mantiene a muchos paralizados e incapaces de comenzar. Aprendemos haciendo y cometiendo errores. Piense en los momentos en tu vida en los que fracasaste, pero cambió de dirección y tuviste éxito al final. Si pusiste en practica estos 7 puntos, comparte tu experiencia en la parte inferior de este #vForo y en redes sociales.
